El Walkera F210, presentado al mercado en la Feria de Nuremberg este año 2016, pertenece a una nueva categoría de drones de carreras, en una talla más compacta, 210 en vez de 250.
Las ventajas de este menor tamaño son varias, pero aún pudiendo alojar el equipo necesario para su función FPV (su cámara y transmisor de vídeo), su mayor ligereza le permite ser más rápido y también más resistente.
ABRIENDO LA CAJA
El Walkera F210 se presenta en la típica caja de cartón de apertura superior de Walkera, aunque el relleno protector de su interior, en vez de corcho blanco de embalaje, como en otros modelos, viene en espuma plástica de buena calidad y acabado, pensada para llevarlo en la mochila para drones Racer de Walkera, en la que entra perfectamente.
Nada mas abrir la caja encontramos el nuevo cargador rápido, especial para las baterías de 4 elementos Lipo que usa el F210, conectable directamente a 220v, y de una gran sencillez, aunque pudimos comprobar que carga y equilibra bastante rápido y sin problemas.
Bajo el cargador encontramos la emisora Devo 7, standard en este modelo, que es muy adecuada para drones racer, y que ya viene programada para el F210.
Junto al dron F210 vemos una batería, dos juegos de hélices (uno de recambio, 8 hélices en total), los acostumbrados cables de conexión de emisora y una bolsita con útiles, donde vemos una pequeña llave para sujetar la cabeza hexagonal del motor para apretar o soltar las hélices.
Un Racer FPV innovador y funcional a tope.
El diseño del F210 no deja de ser muy estético, pero está pensado para, en el menor peso posible, aportar todos los elementos necesarios para ser un pequeño campeón.
Llama la atención la defensa delantera en forma de arco, similar a un casco, de plástico muy resistente. Deja el espacio justo para la visión de la cámara, dando algo de margen para orientar ésta mas arriba y abajo, aunque no tanto como en otros drones racer menos radicales de la marca, como el Runner 250 Advance.
Toda la parte frontal del chasis es metálica, y podemos testificar que es realmente dura (fué un buen golpe), protegiendo también a los leds frontales, muy potentes por cierto.
Otro detalle son los soportes de motor, que además de tener un nuevo diseño en V que permite una cierta elasticidad en aterrizajes fuertes, rodea a los motores por su parte exterior protegiéndolos contra roces y choques que normalmente harían pararse o bloquearse un motor.
El soporte de batería situado en la posición más alta nos habla a gritos de una vocación «cañera» y muy competitiva, mas que de un dron de iniciación, ya que le confiere un centro de gravedad muy alto, bueno para giros cerrados sin derrapar y cambios rápidos de dirección sin inercias excesivas.
La batería de 4 elementos en vez de los más normales 3 genera suficientes voltios para que los pequeños motores se revolucionen mucho pero progresivamente, se capta teniéndolo en la mano.
En resumen, el Walkera F210 se presenta como un purasangre para conseguir prestaciones y resistencia por encima de cualquier ootra consideración.
Volando se comporta bastante mas estable de lo que podíamos suponer viendo el centro de gravedad, y realmente noble en reacciones, dentro de que es rapidísimo de reacciones y velocidad.
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